Capítulo 2

Capítulo 2

David tiene que avisar y llamar a su novia, para decir en la calle que vive, marca el número, y ella lo coge:

-Hola amor

-Hola lucia.

-¿Qué tal estás?

-Muy bien, ¿Y tú?

-Muy bien, te iba a decir en la calle donde vivo, mira una vez que está en la estación “Las Mariposas”, sigues todo recto y hay  un cartel “Mira-mariposas”, pues giras a la derecha y hay una urbanización que se llama “Las Viñas de los Aguilar”, (Que es la urbanización que son terrenos del Señor Aguilar).

-Pero todo esto está muy lejos de aquí.

-Bueno, yo iré a visitarte. Pero mira que eres más vaga.

-Ya me conoces.

-Bastante, un ida quedamos y tú ya sabes....

-Pero mira que eres plasta.

-Ya me conoces.

-Bueno Lucia, te tengo que dejar, un beso mi amor, te echo de menos.

-Y yo cariño, un beso.

La pareja cuelgan, los dos al mismo tiempo, Lucía lo va a echar de menos en cambio David, cree que se ha enamorado de Laura, pero es una cosa que no puede evitar, pero tampoco puede hacer daño, a su Lucii.

En el centro de la cuidad, la mansión de los Aguilar, allí viven Javier y su hermana, pequeña de dieciséis años Elena, una jovencita que quiere llegar a ser modelo, parecerse a Ángela, La gran modelo que hay en estos tiempos, y ha Vera le falta muy poco, es guapa, sexy, simpática, amable, muy lista en los idiomas. Con ellos, vive Silvia, de familia también muy rica, es guapa, sexy, aunque un poquito mala, puedo alguien se pone en su camino; ella es la novia de Javier, el señor de la mansión.

Justamente llama alguien, abre Silvia lleva unos pitillos, tacones y una camiseta blanca con un chaleco de piel que vale más o menos que Javier. ¿Quien será?; Es una chica muy morena, pelo oscuro, ojos oscuros, guapa, pero viste muy a la moda intenta parecerse a la modelo Ángela.

-Hola, buenos días. Me entere que estaban buscando personal de limpieza, por un buen sueldo.

-Bueno si es verdad, pero lo del sueldo lo lleva Javier; así que tiene que esperarse a que venga Javier.

-Entendido, señora Silvia.

-¿Cómo te llamas, señorita?

-Alicia, pero si le cuestan pronunciarlo, prefiero Ali.

-Entendido, Ali.

-Puedes pasar al salón.

-Pero...pero creía que este era el salón.

-Por eso te voy a decir donde esta cada habitación, mira esta es la escalera, para subir a la primera plantan donde tenemos, las habitaciones, en la segunda tenemos más habitaciones y en la tercera una guardilla, y la cama de Susana. Los baños están en la primera planta, tenemos distintos cuartos de baños, jacuzzi, bañeras de hidromasajes.

-Vuestra casa es preciosa.

-Bueno hay esta Javier, un beso Javier, esta es Ali.

-Hola, señor Javier.

-Aprendes  muy Rápido.

-Lo sé, soy muy lista.

-Y guapa.

-Gracias.

-Bueno no hay mucho que explicar, cualquier duda le preguntas a Maria, y ella ya te dice.

Bueno para tener dieciocho años es muy joven y se conserva muy bien.

-¿Porqué me miras tanto?

-No sé.

-Bueno...-Entre ellos se ve que les gana el todo, hay química entre ellos, es la primera vez que se ven, Javier cierra el pestillo y la desnuda le quita todo menos la ropa interior, entran en la guarida secreta  tiene en su despacho solo lo sabe el, pero ahora lo sabe Ali. Pero tras besos y más besos, está tumbado uno al lado del otro, en la cama de oro, pero en eso, se escucha un forcejeo en la puerta-.

-Parece que es mi novia Silvia, está intentado abrir la puerta, ¡Vístete rápido!-Ella obedece, no comprende por qué se ha liado, con ella si es la primera vez que se ven, porque esos impulsos, como Silvia se entere la hecha de la casa, y no quiere que ocurra eso, quiere irse a estudiar a fuera con sus compañeras-.

-Ya voy, estoy lista.

-Sal de aquí.- Javier mueve el libro rojo, que tiene en su estantería, y de pronto desaparece la habitación, y vuelve hacer una pared normal y quita el pestillo-.

-Ya puedes entrar.-Dice gritando-. 

-¿Que estabais haciendo para que no pudiera entrar?-Antes de responder ella que no sabía que preponderar, responde Javier-.

-Estábamos hablando del dinero que le iba a dar, ¿A qué sí?

-S...si

-Bueno ya te puedes ir ¿empiezas mañana?

-Sí, claro.-Ella le da su número de teléfono, y Javier lo guarda en su agenda personal-.

-Adiós.

-Adiós.-Y la chica vuelve a su casa-.